Fervenza Casa Grande & Restaurante Hotel

La amabilidad en el trato. Lugar donde el maestro Ramiro está promocionando este complejo hotelero, nuestras felicitaciones y de manera especial a Beatrizy al cocinero cuyos platos han resultado exquisitos. El entorno muy relajante. Os recomendamos visitarla y disfrutarla pues sus habitaciones son muy acogedoras.

Entorno precioso. Comida buenísima. Atención inmejorable! Repetiremos din dudarlo.

La comida espectacular, y el lugar es extraordinario, es impresionante.
Paz, belleza y armonía.

Todo perfecto. Me encanta el sitio, el entorno, la comida, la atención…

No me canso de ver lo bonito que es el entorno en sus diferentes estaciones del año. Un lugar muy tranquilo.

Un lugar paradisíaco una buena atención estupenda comida t una buena bodega de vinos gallegos.

Hoy fue la celebración de la comunión de mi hijo y estuvo todo perfecto. Un lugar precioso y con un personal estupendo que hizo que fuera un día para no olvidar. Mil gracias por todo!

Grata sorpresa la que nos hemos llevado al conocer este establecimiento ubicado en un paraje privilegiado, encantador y cautivador.
Aunque cuenta con alojamiento no hemos probado más que el restaurante, ubicado en una de las construcciones del lugar, acondicionado con muy buen gusto respetando la arquitectura autóctona, con un trato y un servicio por encima de las expectativas y con una comida perfecta, con carta variada de productos galegos y alguno foráneo, pero desde luego con muy buen gusto y buen hacer en la elaboración y la presentación. Repetiremos seguro!

Buen sitio para pasar el día y disfrutar de una excelente comida junto con la profesionalidad del personal. Muy recomendable!

Excelente restaurante y casa rural, la comída es de primera calidad y el servicio y trato de 10!

Genial el sitio el trato y la comida.

Un lugar excepcional, con una cocina moderna exquisita. Sin duda un lugar de 10. El lugar donde se ubica es precioso. La atención de su empleados es de lo mejor. Sin duda un lugar para volver.

Sin duda un lugar magico, esa fue mi primera palabra hoy al describirlo! es precioso! y desde luego el trato recibido espectacular! mil gracias.

El lugar sin duda tiene magia, y el trato del personal es exquisito! Totalmente recomendable.

Enclavado en un precioso paraje, muy buena cocina y excelente atención.

Un entorno natural para disfrutar y una cocina que no olvidarás.

Un lugar único tanto para descansar y desconectar como para celebraciones… espectaculares los asados de Capón y Cordero lechal.

Muy buen lugar para cenar y descansar por un par de noches. Personas buenas y bellas de la colocación.

El lugar prefecto para desconectar del estrés de la cuidad y cualquier problema. Solamente encontrarás naturaleza por donde vayas. El sonido de los pájaros, el sonido del río y un paisaje totalmente verde es lo que encuentras al despertar y asomarte a la ventana. El servicio totalmente atento a todo. La limpieza muy buena (teniendo en cuenta que es un hotel rural, por supuesto). El desayuno para mi parecer bastante escaso. La comida y cena de bastante calidad y muy sabrosas pero un poquito caras. Volveré a venir seguro. Recomendable 100%.

La casa está situada en un entorno precioso, hay un molino muy cerca, en el que se puede entrar pidiendo las llaves en la casa. La comida muy rica, recomiendo las croquetas y la empanada casera (que varía en función del día), aunque en general todo lo que he probado las veces que he ido era para repetir. El trato estupendo. También hacen celebraciones, asistí a una boda, en la que la ceremonia se realizó allí y me pareció preciosa.

Es un lugar idílico, una casa de piedra totalmente restaurada, un entorno de bosque y río precioso, pero me ha decepcionado bastante por las expectativas que tenía del entorno, iba con la idea de un paseo por un bosque al lado de un río, donde en algún punto poder bañarme; Sin embargo, no me encontré con eso, dado que el camino del bosque, que si bien es precioso, transcurre bastante alejado del río, y sin una posibilidad de acercarte; La única zona en la que puedes ir al río, justo al lado de la casa, no es muy apropiada para el baño por sus corrientes. Por último, la cafetería no me ha gustado demasiado, dado que he tenido que dedicarme a buscar a alguien de personal, por que no había nadie en la barra ni a la vista.

Las instalaciones y el entorno espectaculares. El personal encantador. Trato familiar y comida increíble. 100% recomendable.

Casa antigua en buen estado y reformada. Vistas increíbles y tranquilidad absoluta. Puedes hacer senderismo. Habitaciones bien preparadas para la estancia de personas que necesitan descanso. No hay cobertura para el móvil. Lugar acogedor con buenos paisajes exteriores.

Sitio moi agradable, boa atención e boa cociña. Contorna impresionante para dar un paseo á beira do Miño.

Me gusta especialmente la restauración de todo el contorno, que permite a la gente ver como se trabajaba en el pasado. El comedor del restaurate está muy bien logrado, manteniendo los hornos antiguos. La carta no es demasiado extensa, pero la comida está muy sabrosa.

Vistas muy bonitas, buena comida. Ideal para pasar un dia relajado y dar un paseo. Piscina y aparcamiento.

Tuvimos un problema al hacer nuestra reserva por booking y al llegar a la casa nos lo solucionaron muy bien. Trato muy agradable. Un lugar increíble para descansar y hacer senderismo.

Me encantó. El personal super amable. La comida exquisita. Una elaboración muy cuidadada y todo riquísimo. Los postres buenísimos. Y el entorno divino. Tanto me gustó que olvidé hacer fotos de los platos. Disculpas. Volveré para subsanar el error. Jajaja.

Un precioso restaurante en un paraje bellísimo, muy buena la atención y muy rica la comida. También hay alojamiento en una gran casa, restaurada de una forma magnífica.

Un paraíso para perderse y desconectar unos días. Ausencia de cobertura en un paraje impresionante. Fui con mi pareja y mi perro y en una sola noche desconecté de una época de mucho estrés. Visita obligada al molino y a su restaurante, que ofrece una calidad exquisita. Merece la pena también el desayuno, muy completo y casero. La atención también de 10

Todo perfecto. Un lugar increíble, con vistas increíbles. Lo único que falla es la atención al cliente. Muy mal servicio.

Maravilloso! Nos ha gustado muchísimo. La casa es preciosa, el personal majísimo… Volveremos seguro!

Me casé allí hace ya 6 años, el 1-
10-11, y a día hoy muchos de los amigos que me acompañaron entonces me recuerdan lo bien que lo pasaron, lo bonito que es y la buenísima comida que disfrutamos.

Uno de esos lugares a los que siempre vuelvo, con la bici, a tomar algo… O a sentarnos junto a rio… Un sitio especial de los que da PAZ!.

Unos de los mejores sitios que he estado. La casa preciosa, el entorno maravilloso. Relajante, acogedor. Perfecto. El trato esquisito, inmejorable la verdad. Volveré seguro.

Un lugar maravilloso, es como estar en un cuento! … volveré sin duda!

Nos ha sorprendido muy gratamente. El servicio ha sido excepcional, muy personalizado y muy agradable. La localización es increíble, es un sitio para relajarte, con el miño en frente y un paisaje excepcional. Nos dejaron encender la chimenea y la verdad es que eso sumó muchos puntos. Todos los detalles cuidados, un Pazo precioso. Lo mejor para mi? La comida… es todo ecológico, hasta el pan lo hacen ellos. Nos pusieron una mesita super romántica para comer y lo disfrutamos al 100%. Sin duda para repetir, tanto en verano como en invierno, con amigos o con pareja. Un sitio perfecto con una muy buena relación calidad precio.

Excelente casa rural, excelente cocina. Ubicada en un precioso entorno.

Precioso para hacer una boda! Y se come genial.

El sitio estupendo tranquilo agradable y bonito, el que no haya cobertura de móvil no es de reseñar ya que se va para descansar o que no haya televisión en las habitaciones. Lo que hay que mejorar es que el baño es incomodo, la ducha un poco estrecha y sin presión de agua suficiente, no hay agua de buena calidad en las habitaciones, dicen disponer de un manantial pero si esta seco te quedas sin beber a no ser que compres una botella de agua, el suelo de madera estupendo, pero se escucha absolutamente todo del piso de arriba, como otro comentario que hay digo TODO, hasta las parejas… Alguna que otra camarera con pocas ganas de ser agradable y que no está a gusto en su trabajo, eso o le había dejado el novio hace poco. El pitido cada vez que entras al bar insoportable, por lo demás estupendo. Es una suma de entorno y servicio, esto último es normal, se nota que hay poco personal. Si quitas el río los árboles la tranquilidad y el entorno es un hotel barato de tres estrellas. Por cierto la mala carretera al entrar el suelo de barro y los mosquitos es el encanto del lugar y es para eso, si no iros a un parador en pleno centro de una ciudad.

El sitio estupendo tranquilo agradable y bonito, el que no haya cobertura de móvil no es de reseñar ya que se va para descansar o que no haya televisión en las habitaciones. Lo que hay que mejorar es que el baño es incomodo, la ducha un poco estrecha y sin presión de agua suficiente, no hay agua de buena calidad en las habitaciones, dicen disponer de un manantial pero si esta seco te quedas sin beber a no ser que compres una botella de agua, el suelo de madera estupendo, pero se escucha absolutamente todo del piso de arriba. Alguna que otra camarera con pocas ganas de ser agradable. El pitido cada vez que entras al bar insoportable. Por lo demás estupendo.

Lo mejor la localización. El alojamiento está bien. El restaurante oferta poca variedad y con unos horarios muy cortos para mi gusto.

Es un lugar mágico, el entorno es un auténtico privilegio, no hay coches, no hay carreteras, no hay cobertura, solo la casa, tu y la naturaleza. La casa está impecablemente restaurada, con sus deterioros fruto del paso del tiempo lógicamente, respetando la estética propia, no hay palabras para definir el encanto de esta casa, hasta el hilo musical es perfecto. La cocina es buenísima, poca variedad pero excelentente, con la ternera cachena y el queso gamoneau como protagonistas en muchos de sus platos. El comedor es acogedor y tranquilo, hay un pozo de agua dentro de la propia casa de la cual te puedes servir. Es uno de los lugares más románticos que yo haya visto. También tiene piscina exterior y actividades como bici, canoa, senderismo… Un molino antiguo restaurado justo al lado y un largo paseo bordeando el río. He pasado muchísimas noches de mi vida en esa casa, conozco todas las habitaciones, y si algún día me toca la lotería la compraré, hasta ese punto me gusta. Hace unos años que no la visito pero su personal entonces era encantador, especialmente Miriam, parece que hubiese nacido para aquel lugar, voz dulce, amable, discreta y atenta. Nadie que tenga buen gusto debería quedar decepcionado de esta casa. Además tiene cierta historia relacionada con la guerra civil, procurad que alguien de allí os cuente el porqué, por ejemplo, del nombre de la habitación "la trabuqueira".

Acceso complicado lo que redunda aún mas si cabe en ese encanto de lo apartado, silencio, desconexión, paz. Restaurante con carta limitada pero correcta. Habitaciones espectaculares. Enxebre. Recomendable.

Sitio aislado y muy tranquilo. Para olvidarse de todo y relajarse en un entorno espectacular junto al río Miño. La cama de la habitación principal comodisima. Uno de los sitios donde mejor he dormido.

Paraje magico sin igual en plena naturaleza y una casa rural antigua galega con encanto para quien sepa apreciarla al igual que su gastronomia deliciosa en cada una de sus elaboraciones. He celebrado mi boda recientemente y ha sido genial todo en conjunto. Repetiria mi boda alli pues tenia muy claro que era donde la queria celebrar y estoy deseando volver a probar la esquisitez de sus platos.

Es un lugar pintoresco en un marco natural magnífico.

Me encanta ese sítio, deseando volver a disfrutar de momentos inolvidables! …

Una autentica maravilla un lujo la casa el entorno y su fauna hemos visto una nutria Todo perfecto ni una sola queja el paseo por el rio una belleza.

La zona es preciosa, con una ruta espectacular que bordea el río; la atención, excelente, con un trato exquisito y cercano a la vez.

El enclave maravilloso. Las habitaciones pequeñas, precio excesivo para lo que son. Un timo que cobren temporada alta cuando no ofrecen todos los servicios al 100% (piscina).

Lugar precioso, comida moi boa e aloxamento ben. Para repetir.