Les Cols Pavellons Hotel

Es ideal parejas, romántica, minimalista, recomiendo un finde por sorpresa a la zona, es diferente a cualquier hotel habitual. Usar la imaginación ayuda, bombas aromáticas, cremas, juguetes …

Es una experiencia diferente que hay que vivirla.

La arquitectura en perfecto equilibrio con el entorno, así como el servicio atento de todo el personal
Experiencia SUBLIME…

Excelente comida. Alojamiento muy original.

Es el lugar idóneo para desconectar completamente de todo!
Ha sido espectacular nuestra estancia.

Otro concepto hotel a experimentar. Tengo que decir que la experiencia es sorprendente y probablemente irrepetible en otro lugar. Habitaciones con las paredes, suelo y techo de vidrio. Es un entorno minimalista que invita a vivir el momento sin artificios. El personal del hotel es muy amable y agradable. El precio no es del todo asequible pero vale la pena probarlo una vez y si telo puedes permitir, tienes un restaurante con 2 estrellas Michelin. Solo dos aspectos a mejorar : el aire acondicionado no estaba encendido al entrar a la habitación, los critales no estaban perfectos pero casi.

Estuvimos este fin de semana pasado, la verdad es que de arquitectura genial pero todo lo demás un timo. Si por ejemplo vas al baño por la noche debes encender o todas las luces o ninguna, no hay una sola luz para leer, el desayuno te lo sirven en la cama porque no hay fisícamente otro lugar donde disfrutarlo, no hay una triste silla donde disfrutar de la terraza o un espacio común donde desayunar, donde hubiese una TV o un lugar donde tomar un café y para un lugar donde pagas 340 euros la noche, que no tengan la posibilidad de ofrecerte un miserable croissant o algo dulce como alternativa por si no te gusta lo salado para desayunar, lo encuentro desastroso. Entiendo que si vas a un hotel medio-bajo puedas tener carencias pero por ese precio, es increible que haya una única persona que marcha a las nueve y si tienes algún problema te dejo un tlf. Móvil y como si fuese una casa rural, me llamas. Lo que llaman piscina, que es una bañera mona se empieza a calentar a partir de las diez, por tanto por la tarde está genial pero por la mañana olvídate de utilizarla. Vamos que es normal que le diesen un premio de arquitectura pero en funcionalidad y servicio yo le daba un cero.

La HISTORIA del … * LES COLS * Pabellons Restaurant, Olot. La AMISTAD y la buena COCINA es la ESENCIA del Placer que sempre perdura en el TEMPS Gràcies marcel.

Experiencia única e inolvidable.

Experiencia única e irrepetible.

Una experiencia inolvidable.

Excelente! Y por que no hay 6 estrellas… un hotel diferente y especial, te hace sentir en otro mundo… todo de cristal, con una bañera de la que no querrías salir nunca y un servicio súper atento Recomendable 100%

La HISTORIA del … LES COLS Pabellons. La AMISTAD y el buen SABOR sempre perdura en el TEMPS Gràcies marcel.

Explota las sensaciones al 100 % Nos encantó el concepto, el diseño y sobre todo el trato. Echamos en falta algún colgador para las toallas y algo de mobiliario en la habitación porque mi esposo iba algo fastidiado de la espalda, fuera de eso un lugar muy especial para desconectar y soñar despierto y dormido.

El sitio más precioso k he visto un encanto en todos los sentidos.

Fantástico lugar y el personal es tan excelente. Tiene una experiencia única.

Experiencia única y original.

Servicio catastrofico La comida esta demasiada cara para el precio del menu No es un restaurante que puede tener 2 estrellas.

El menú vale la pena cada céntimo que usted pagó por. En pocas palabras: cocina creativa con productos locales.

No me gusto nada. El pabellón tubo mejores días, supongo que para una pareja que se acaba de conocer pues puede que sí. Disgustado por qué era un regalo de mis padres y mi hermana. Darse un paseo por el bosque relaja mucho y sobre todo sale mucho más barato.

Tranquilidad y relax. La bassa, espectacular. La bolsa de picnic y los tarjetones, para sentirse especial. Volveremos, para acabar de descubrir el precioso entorno.

Nos regalaron una noche de hotel para nuestra boda. Solo puedo decir que fue una experiencia nefasta. Las razones son: — Habitaciones sucias — pelos-, albornoz con objetos en los bolsillos (pañuelos y mecheros), zapatillas talla pequeña, el agua de la bañera turbia. No hay sitio donde dejar las cosas — exageradamente minimalista, rayando lo absurdo- — Servicio de habitaciones nada correcto, por ejemplo, nos sirvieron el desayuno y los cafes estaban en mal estado. Se cambiaron tres veces desde las 9h hasta las 11.30h para solucionarlo. La compensacion por las molestias fueron tres chocolatinas diminutas — La cena no vale lo que te cobran, no sorprende, y sevicio asqueado — El picnic son las sobras del desayuno. — Lamentable la experiencia para algo que dice que tiene dos estrellas michelin — Evitarlo, es el mejor consejo que os podemos dar.