Comentario del The Dove Inn 2*

Elizabeth nos saludó cuando entramos por la puerta. Ella nos dio un recorrido y nos llevó a nuestra habitación. Teníamos una bonita cama y nuestro propio baño. Nuestra bañera de piso de garras era enorme. Teníamos botellas de agua y artículos de aseo de cortesía. Y Elizabeth preguntó si estaba bien que nos trajera una bomba de baño de su tienda favorita. Cuando llegamos a casa después de nuestro concierto, nos ayudamos a refrigerios gratuitos como barras de fruta y granola. Tomé una galleta y un poco de té de tiempo somnoliento. Vi la televisión en medio de la noche, porque las paredes eran tan gruesas que no oíste ni molestabas a ningún otro huésped. Nos despertamos con el olor a tocino. Disfruté de un baño en la bañera antes de bajar a desayunar. Había yogur, granola y bayas, café increíble y espresso, y elegimos entre pavo y tocino regular — cocinado a la perfección — y panqueques regulares o sin gluten — Tenía uno si cada uno. La mantequilla era suave y el jarabe estaba caliente. Teníamos una nevera en el pasillo donde almacenamos nuestras sobras de la cena. Tenían 500 películas entre las que podías elegir y muchos libros, periódicos y revistas. Elizabeth nos hizo sentir como en casa y bienvenidos, e incluso nos llamó para obtener información de envío para que pudiera enviar mi cargador de teléfono que dejé atrás. Nuestra primera experiencia de B&B fue un éxito. Definitivamente vamos a volver. Y ella ha puesto el listón muy alto. Gracias por la maravillosa experiencia, y por ir más allá. ¡Definitivamente tenemos más de lo que vale el dinero!