Thermae Palace

Hotel

Amabilidad del personal.
Calidad de los servicios.
Impresionante vista al mar.

Magnífica estancia, hotel con encanto antiguo, hermosa habitación grande con vistas al mar, gran restaurante, tranquilo, aparcamiento.

Un magnífico edificio, una habitación amplia con pequeños productos disponibles, limpieza impecable, ropa de cama ideal y la calma 😍 lo más evidente es la situación, salimos del hotel y estamos en el dique cerca de la playa. Personal muy amable y servicial, que habla varios idiomas. Un desayuno king muy fresco y bien presentado 🤩!
Solo un inconveniente, el estacionamiento en excedente de la factura del hotel, ¡pero no le quita el magnífico fin de semana que pasamos!

Todo está bien.
El delicioso restaurante.
Las habitaciones son cómodas.

Gran estancia de dos noches. Demasiado corto.

Momento mágico, vista impresionante😊
Servicio impecable y 👍 de habitaciones.
Nuestra cena fue muy sabrosa.
Muchas gracias🤩

Excelente hotel impecable servicio el restaurante es muy amplio comemos muy bien todo es fresco del día, la higiene es perfecta.

Hermosa vista al mar era agradable.

Hermosa habitación con vistas al mar, tranquila, ropa de cama muy cómoda, acceso directo a la playa. Desayuno abundante. Volveremos…

Muy buena estrella hotelera agradables reglas covid 19 son respetados.

Descuidado, negligente y descuidada. Triste ver un bonito edificio ruinoso.

Hotel muy agradable, idealmente situado.

Las camas son cómodas, las habitaciones están en la edad del lado de la vida, y la resterant personal para el desayuno también debe ser actualizado con habilidades de la gente y de servicio. Yo recomendaría este lugar por su ubicación en la playa y cómodas camas. Si pudiera dar dos y media de la estrella lo haría.

Cansado y sucio! una vez que fue sin duda un hermoso edificio, pero está cayendo a pedazos en las costuras! No hay Wi-Fi en la habitación! La habitación era grande con Vistas al mar, pero muy viejos y se desvaneció. Había una colilla de cigarrillo en el hall de entrada cuando llegamos y todavía estaba allí cuando nos fuimos. No vale la pena el dinero.

Sí… Nos alojamos dos noches aquí. Habíamos reservado una habitación con una cama grande, nos trataron con dos camas individuales pegadas juntas, el hotel estaba lleno tan imposible de cambiar. Una bienvenida fría, habitaciones viejas pero grandes. Aparcamiento de pago.
Para un hotel de cuatro estrellas, no rompe bares.
La mejor ubicación por otro lado!

Usé la bonita terraza con vistas al mar sólo para disfrutar de un café. Este fue excelente, acompañado de galletas y un papillote. Personal atento y amable bienvenida, ya que los consumidores se instalaron en
para el almuerzo, sin comentarios sobre el tiempo pasado frente a un simple café. La gran clase y cortesía que me gustaría encontrar más a menudo en Francia.

Este hotel tenía unas extrañas cuestiones. David Lynch se sienten en casa. El restaurante es excelente, aunque.

Hotel muy agradable que es perfecto para seminarios. De fácil acceso y con parking. El edificio ya no es fresco y realmente debe ser renovado. Las habitaciones están bien equipadas y son bastante amplias. La vista directa del mar es magnífica. Acceso directo a la también. No apto para niños.

Tuvimos un evento de un día, con más de 100 asistentes con el desayuno y el almuerzo de catering del hotel. El personal del Hotel fue extrañamente mal humor, el servicio de catering fue falta de atención y la comida bastante poco espectacular. La falta de baños y allí distancia a la sala de conferencias fue muy práctico para los asistentes. Un montón de pequeños problemas de una gran falta de platos en el buffet de desayuno (menos de 1 plato por 3 asistentes), pero no hay personal para abastecerse de placas o rellenar el vacío de la leche de la jarra (no, incluso después de ser notificados). No hay papeleras — era un día cálido de la habitación miró rápidamente de la papelera como botellas de agua y otros desechos no podía ser desechados. Para un hotel de 4 Estrellas se produjo una importante decepción.

El lugar sigue siendo mágico, las amplias habitaciones, bien equipadas, con una vista impresionante de la playa.
El personal amable, la recepción francesa y con mucho humor lo que es apreciable. No entiendo las críticas, por €155 habitación para dos, balcón en el mar y desayuno incluido que piden más? Habitación limpia, el balcón podría ser mejor mantenido ropa de cama súper cómoda.
Albornoz, 3 toallas por persona, artículos de tocador Bulgari, secador de pelo, bandeja de bienvenida, hervidor de agua botellas de café…
El único inconveniente es la hora tardía a la que podemos tomar la habitación 15H… 13/14h sería agradable…
Sólo puedo recomendar, sólo para el marco lleno de encanto y por la amabilidad del personal.

Primero los pros. El Hotel está muy bien situado, frente al mar y cierra el buen número de bares y restaurantes. Las habitaciones tienen un buen tamaño. El desayuno está bien, sin demasiadas opciones saludables.
El Hotel es enorme, y la falta de mantenimiento era visible. La puerta de mi habitación no era muy bueno para cerrar y era posible ver qué edad eran todo. El gimnasio es super básico. Uno de los malos lados era el personal del restaurante, no parece ser feliz o proactivo con nuestras órdenes.

Hermoso entorno pero completamente descuidado poco o ningún personal de 5pm no hay servicio de habitaciones. Experiencia muy insatisfactoria aparte de la vista al mar, estropeado por los focos se volvió a las habitaciones tan pronto como el atardecer. El personal del restaurante es muy inadorable. Los precios por otro lado son altos tanto para el Hotel y el restaurante breve un paso que se puede evitar. Qué lástima por este lugar que merece mucho mejor.

Entre la recepción por el personal, la limpieza de los lugares, el envejecimiento de las habitaciones y la calidad de los servicios, no sé por dónde empezar… Qué decir excepto que esta "perla de 4 estrellas" ha perdido bien de su soberbia. Pasé dos días allí, y pocas notas positivas. Fue la primera vez que estaba encantado de ir a casa y haber reservado sólo dos noches en un hotel!
Una puerta de baño en mal estado, un fregadero sin tapón para el sifón, un rubor que no funciona a pesar de nuestras observaciones en la recepción, una alfombra que ha vivido lo suficientemente bien, una insonorización inexistente, tareas en las paredes blancas que han transferido a la Jau Hacer con los años, un espacio muy mal dispuesto en la habitación y la ventana que no se abre a fondo… Poco más que el Hotel, la zona de sauna pero todavía aquí, falta de acabado… No hay música y brillo más que relativo…
La calidad de la comida y el desayuno buffet es apreciable pero no arriesgarse a pedir dos panqueques para el 4H en el riesgo de ver las mesas llegó después de haber sido servido antes y por lo tanto esperar más de 30 minutos sus panqueques!
En Resumen, un hotel para olvidar! Afortunadamente la ciudad de Ostende habrá atrapado con todo esto…

Sólo hay la situación frente al mar, que es bueno. El Hotel está degradado. Es hora de que fue renovado. Por su precio… ir a otro lugar.

Excelente ubicación! Salida inmediata en la playa. Hotel de estilo Art Déco muy antiguo que merece una modernización, especialmente habitaciones. El personal muy amable, el desayuno y la vista al mar.

Solía ser hermoso. El lugar sigue siendo Grand, la vista también. Las habitaciones están limpias. Las camas son cómodas. El Hotel está bien cuidado. No hay Spa.

Nada de que quejarse cálida bienvenida, personal muy agradable, las habitaciones impecables. Que es la segunda vez que hemos y estamos siempre tan contento.

Muy buen lugar, habitación muy ordenada. Desayuno A recomendar.

Sin duda es un encanto anticuado, pero es una experiencia maravillosa para vivir.
La comida y el desayuno son abundantes y la vista de la playa es excepcional. Ya sea en invierno o en verano es un lugar pintoresco con mucho encanto.

El Hotel es bastante descorrido en algunas esquinas pero todavía tiene su encanto. Pero uno nota los rastros del tiempo en muchas esquinas enormemente. El desayuno es el mejor en toda la estancia.

Palacio de envejecimiento… Por 200 euros, me ofrecieron la habitación 110… Pared sucia… Alfombra llena de tareas… Baño con molde… Después de haber explicado mi decepción sobre la habitación propuesta, me ofrecieron otra habitación: la 209… Muebles más limpios pero antiguos… Sin terraza mientras pagué terraza con vistas al mar… No te recomiendo que te detengas ahí.

Excelente ubicación Frente a la playa. Antiguo y abandonado efecto pero creo que están siendo renovados. El desayuno está bien.

Antiguo hotel para actualizar. Tranquila, pero necesitan ser limpiados. El bar es agradable. No se ve las alfombras…

A la derecha, cerca de la playa, pero muy anticuado y en la necesidad de una actualización. Debe haber sido un impresionante hotel en su día.

¿volver a sumergirse en la antigua era burguesa de la costa belga es su objetivo? Venga a este hotel pero detrás de la apariencia no es el escondido… cortinas dañadas, alfombras habiendo vivido y piso patinado por muchos… ¡ una renovación es necesaria! 2etoiles para la comida y la decoración pero sin más.

Una magnífica estancia. Fantástico personal y la comida era deliciosa y el servicio en el restaurantt.

Es viejo, vamos a tener en cuenta que primero. Y es visiblemente en la necesidad urgente de una gran cantidad de restauración. Pero es uno de los hitos de nuestra costa. Y vale la pena una visita. Pero para lo que todavía es ahora, los precios son un poco demasiado altos. Tengo que decir que la cama era increíble.

Antiguo edificio con su encanto de otra época pero espléndidamente situado con sus habitaciones terrazas sobre el mar que evocan un sanatorio pero lleno de un ambiente retro tocando.

Así que me gustó mucho ver agradable y tranquila ubicación y buen servicio amable.

El personal no habla francés, entiendo que este ubicado en la región flamenca y que tengan sus razones para no hablarlo, pero yo como extranjero es la lengua que utilizo para trabajar/ comunicarme, siendo lengua oficial, encuentro terrible que lo reemplacen por el ingles … es una falta de identidad. La habitaciones son antiguas y están descuidadas, las alfombras sucias. La conexión de internet nula. Desayuno: el café había que pedirlo, lo mismo para leche. Tendrían que cambiar el nombre. "het oude vlaams Palace hotel"

No hay personal en la noche. No enchufe eléctrico en la sala.

Todos los días o más cada día, mi madre y yo ir a la Brasserie de Albert y
tienen algunas tortitas y té por la tarde. Debe decir el servicio es amable, le
sentir que se remonta a 1930, punto negativo son las ollas de té rotas, si no
excelente té y gaufres o panqueques. Hotel necesita urgente alcalde restaura-
ción, esperanza de la ciudad de Ostende Inicio ayudando a este maravilloso edificio donde mi madre año 90 y me siento en paz y no rodeado por vacaciones loco
personas;

Habitaciones super grandes, por favor nota estacionamiento es pagando…

¡Uno más para la ropa de cama! zona tranquila agradable, un plus para el privado Estacionamiento, pequeño plano para asiento con anillos sala ds, desayuno era atractivo, para la comida de la noche de la cervecería, no mucho gusto! ¡debe ser más especias o sabores! personal un poco frío en la cervecería, unsmiling. Sin embargo, en general me complace volver, nueva dirección que tiene poco que mejorar.

Este hotel debido a su ubicación en el borde del mar y su facilidad de aparcamiento no se merece dos estrellas. Un nuevo liderazgo que sólo busca su beneficio, el hosterias no es su vocación. El nuevo personal es joven y bonita, pero la falta de experiencia y a menudo contradictorias. El ascensor falla a menudo. Si usted quiere comer bajo la cúpula en frente del mar, puso un casco en la cabeza, porque se pasa de vez en cuando que el yeso del techo se destaca. La infraestructura de envejecimiento, sin mantenimiento para el largo plazo, sólo el diy de la temporada. El desayuno es válido no más. El restaurante también sucede que no es la gran mapa en el exterior bajo la cúpula, pero al día siguiente está prohibido esto depende de lo que el líder está tratando. La copa de bienvenida en la recepción para el gusto de el pis caliente de limón. Antes era el jugo de la fruta fresca que no toque el agua con rodajas de limón. Mi puntuación es de 4 de cada 10.

Misma opinión como verano de Florencia.
Vine para una escapada de fin de semana, me ha gustado el hotel en su conjunto pero no en los detalles.

Thermae Palace un palacio como el nombre. 4 estrellas que sólo vale la pena 2. El hotel está gestionado: salud, chasis, terraza, muebles,.
La limpieza de la terraza va a ser deseadas (malezas, estiércol de transat,. ) y sólo 2 canales de lengua francesa (France 2 y France 3) por 179 € por noche en temporada alta.
Los aspectos positivos: el desayuno, con vistas al mar, facil aparcamiento (11 € / 2 días).